CARTA AL EDITOR
He leído con atención el artículo “Osteotomía valguizante de tibia aditiva medial: análisis de dos tipos de implante”, escrito por la Dra. Pilar Saralegui y colaboradores, del Hospital Italiano de Buenos Aires, Argentina. Los autores hacen una buena revisión de las indicaciones modernas de las osteotomías valguizantes, así como de las características de cada uno de los implantes estudiados.
La osteotomía valguizante de tibia, aunque ciertamente es un procedimiento que ha pasado la prueba del tiempo para el tratamiento de la osteoartritis medial de la rodilla1,2 y, aunque óptimo, dejó de utilizarse en favor de otros tratamientos como los reemplazos unicompartimentales,3 o totales.4 Con las mejoras y aumento de los procedimientos reconstructivos articulares: el tratamiento de las lesiones condales, trasplantes meniscales y cirugía ligamentaria compleja, las osteotomías han resurgido para complementar estas técnicas.5
Existen varios estudios comparando los resultados clínicos de las dos placas para la fijación, y la tendencia es que ambas tienen buenos resultados objetivos y subjetivos.6-8 Cabe hacer mención que los diseños y características biomecánicas de la placa Puddu y de la TomoFix™ son completamente diferentes y, concordando con la Dra. Saralegui, es quizás por esto donde radiquen sus indicaciones. Los estudios biomecánicos favorecen la placa TomoFix™ debido a que su diseño se basa en el sistema LC-DCP de AO, es una placa más larga, con más orificios y, por ende, mayor número de tornillos y pernos.9 Esta placa tiene un mejor desempeño biomecánico en términos de compresión y cizallamiento, lo que en el contexto de una fractura de la cortical lateral se ha asociado a menor tasa de no-uniones, pérdida de corrección y ruptura de la placa en comparación con la Puddu.6
Las posibles desventajas o complicaciones de las osteotomías de apertura, como son la no-unión, la pérdida de la corrección y la modificación inadvertida del slope tibial, especialmente en correcciones de más de 15 mm, se pueden minimizar eligiendo el sistema de fijación adecuado para cada caso.
En la situación de que se necesite modificar la inclinación del slope tibial es relativamente sencillo hacerlo con la placa Puddu, basta colocarla más anterior o más posterior, de tal manera que, como concluye la Dra. Saralegui, cada implante tiene sus indicaciones.
Dr. Arturo Almazán Díaz
Instituto Nacional de Rehabilitación Luis Guillermo Ibarra Ibarra, Ciudad de México
BIBLIOGRAFÍA